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Queremos ser un Sprite dentro del mundo de la moda circular.
¿Qué es un sprite?
Los spriters pertenecen a un grupo bastante misterioso y colorido de fenómenos naturales llamados “Eventos luminosos transitorios” que son iniciados por un gran cambio en el campo eléctrico que ocurre durante el rayo.
Siempre se nos ha dicho y todos creemos de forma errónea que los rayos solo caen del cielo, pero no. Muchas veces salen del suelo y van hacia el cielo. Son rayos diferentes, y fuera de lo común.
La similitud entre Baia y un Sprite es que ambos nacen de un desequilibrio y un cambio.
Este desequilibrio lo asociamos al cambio que se está viviendo dentro del mundo de la moda, gracias al modelo de economía circular. Al cual, nosotros nos unimos con nuestra marca.
Baia es un rayo pensado desde el positivismo, para enviar energía positiva al mundo.
Somos un rayo contra corriente. El rayo diferente, el que se sale de la norma de lo establecido. El que quiere salir de la carrera de la rata, esa vorágine de consumismo, en el que queremos ganar más para tener más, y nunca estamos satisfechos.
El rayo que entiende la moda desde otro punto. Pero no solo en el ámbito de la producción. si no a todos los niveles. Dentro del marco de trabajo justo y condiciones laborales dignas para todos los trabajadores que forman parte de la marca, la lucha en las desigualdades sociales, etc.
Baia nace con la intención de ayudar a frenar el desequilibrio que observamos a nuestro alrededor a nivel social, económico y laboral.
Pero sobre todo para disminuir el profundo desequilibrio existente dentro de la industria textil.
Un desequilibrio que va mucho más allá de lo ecológico, es un desequilibrio social, laboral y estructural.
Otra similitud que encontramos con los sprites es que no son fáciles de percibir al igual que somos conscientes de que tampoco es fácil cambiar de un día para otro la situación actual dentro de la industria de la moda.
Una marca de moda circular creada a la orilla del mar.
Baia nació de largas caminatas en la playa de Santa Baia. Quizás no sea la mejor playa del mundo, pero es nuestra playa.
En esos largos paseos visualizábamos nuestros planes de futuro. Y lo que empezó siendo un sueño de tres hermanos, se ha convertido en una realidad.
Nuestra marca de moda circular.
Donde unimos la pasión por la playa, el mar y la moda con la necesidad de aportar nuestro granito de arena para mejorar el mundo y cuidar el planeta.
¿Qué es Baia para nosotros?
Es esencia – valores- familia.
Baia es risa y complicidad entre hermanos y amigos. Baia forma parte de un plan que comenzó a trazarse hace años cuando ni imaginábamos tener nuestra propia marca de moda circular.
Nuestra pequeña
gran historia.
Verano de 2015, estoy sentada en mi estudio de Londres. A pesar de ser verano, aquí no huele a mar. Lo más parecido al perfume marítimo cerca de mi casa es un puesto de pescado fresco que hay a la vuelta de la esquina.
Llevo en Londres desde el 2004, año en el que estudié un máster de administración y dirección de empresas y donde comencé un camino trepidante en el mundo del derecho.
Cierro los ojos, estoy agotada. Intento recordar porque vine aquí, que fue lo que me trajo a esta ciudad más allá de mis estudios.
No puedo hacerlo. En mi mente solo están dos personas, Fran y Fátima, mis hermanos.
Sonrío. Y lo hago porque nos visualizo a los tres riendo, riendo fuerte, de esas risas que salen desde el estómago y te hacen sentir que nada malo puede suceder.
Nos observo a los tres en nuestra playa favorita, Santa Baia. Y me doy cuenta de que ese inconfundible perfume salado que los tres amamos, fue el marco donde se gestó nuestra marca de moda circular.
Atardeceres de caminatas junto a la orilla del mar y conversaciones sobre inquietudes y sueños que jamás pensaríamos que podían llegar a hacerse realidad.
Pero si lo hicieron.
Recuerdo ese día y ese momento de soledad en mi estudio con total claridad, porque fue el instante en el que mi mente hizo clic y todo cambió.
Por aquel entonces, mi hermano Fran también estaba trabajando en algo que no le hacía del todo feliz, que no le llenaba.
Lo llamé por teléfono y le dije, -Fran, quiero volver a España y hacer lo que siempre he querido hacer. Quiero vivir de mi creatividad. Voy a crear mi propia marca de moda circular.
Fran no lo dudó un segundo, y se embarcó conmigo en esta aventura. Él es la parte racional y analítica de Baia, es el que valora todos los riesgos y el que me ayuda darle forma a todas mis ideas y locuras. Sin él, Baia no sería Baia.
Fran es amante de la fotografía y este proyecto le ofrece la posibilidad de compaginar su pasión por las fotos con sus dotes analíticas. Y le deja tiempo libre para disfrutar de su otra gran pasión, las motos.
Y así, lo que comenzó siendo un proyecto a tiempo parcial, se ha convertido en nuestro proyecto de vida un común y la materialización del sueño de dos hermanos, que quieren aportar su pequeño granito de arena en hacer del mundo un lugar mejor.
